
Arsenal de Sarandí, aquel club del Viaducto que supo tocar la gloria en Primera División y hasta levantar la Copa Sudamericana 2007, acaba de vivir un golpe histórico: tras una muy floja campaña en la Primera Nacional, confirmó su descenso a la B Metropolitana. Será la primera vez en 33 años que el equipo del sur del conurbano bonaerense jugará en la tercera categoría del fútbol argentino.
El conjunto dirigido por Darío Espínola no pudo revertir la mala racha y ahora deberá reconstruirse desde abajo. Para los hinchas, es un momento durísimo, pero también una oportunidad de rearmar el club que alguna vez fue sinónimo de orden y sorpresas en los torneos locales e internacionales.