Ayer la Sampdoria vivió una jornada negra: descendió a la Serie C por primera vez en su historia. Pero si pensaban que el dolor terminaba ahí, se equivocaban. Los hinchas del Genoa, su clásico rival, no dejaron pasar la oportunidad y armaron un funeral simbólico en plena calle: cajón, velas, cánticos y hasta minuto de silencio para despedir al vecino caído.

El fanatismo en Italia no entiende de límites ni filtros. Entre la tristeza sampdoriana y la fiesta genoana, quedó una escena que es puro folklore del tano: pasión, burla y color. Y sí, a veces el fútbol también se vive así… con drama, ironía y mucho, mucho folklore.