Un episodio insólito marcó el viaje de la Selección de Nigeria rumbo a su partido contra Libia. El plantel denunció que el Gobierno libio desvió su vuelo a la ciudad de Al-Abraq, una pequeña localidad de apenas 10 mil habitantes, justo cuando el avión estaba por aterrizar.

El equipo nigeriano fue retenido en esa ciudad por más de 14 horas. Según los jugadores, los mantuvieron con las puertas cerradas del avión, sin agua, comida ni acceso a teléfonos. Ante este “trato inhumano”, la selección decidió no disputar el partido de mañana y están regresando a su país. ¡Una situación realmente alarmante!