
Un 19 de abril de 1989, en el Olímpico de Múnich, el Diego hizo magia antes de que siquiera empezara el partido. Mientras sonaba “Live is Life” de Opus, Maradona convirtió una entrada en calor en una obra de arte. Control, ritmo, carisma y una pelota que parecía estar atada a su zurda. Era la…